Fuentes judiciales informaron que la medida alcanzó a Eduardo Leone, cuyo procesamiento fue ratificado por el delito previsto en el artículo 277 del Código Penal que castiga con penas que llegan a los tres años de prisión a quien “... adquiriere, recibiere u ocultare dinero, cosas o efectos provenientes de un delito”.
El hecho se descubrió cuando el abogado Mariano Pérez denunció en la comisaría 35 la “desaparición de un equipo de videollamadas y teleconferencias de las oficinas de la Comisión Nacional de Energía Atómica”.
“Con posterioridad, Guillermo Abud –empleado de la CNEA- advirtió que ese equipo estaba siendo ofertado para su venta a través del sitio www.mercadolibre.com.ar a un precio de 9.980 dólares”, recordaron los magistrados.
Los jueces explicaron que “concretada la operación comercial mediante ese sitio de Internet y luego de determinarse que correspondía a la CNEA tomó intervención la División Defraudaciones y Estafas de la Policía Federal, se secuestró el aparato y se detuvo al vendedor Eduardo Leone”.
En una resolución de cuatro carillas, a la que Télam tuvo acceso, los camaristas Eduardo Farah y Jorge Luis Ballestero rechazaron los argumentos de Leone, quien sostuvo que había adquirido de buena fe, aunque sin comprobantes, el equipo sustraído el 31 de agosto de la CNEA.
“Sin embargo los elementos de prueba se oponen de modo palmario” a la versión del procesado quien dijo “poseer ocho títulos terciarios en computación” que su especialidad es la “informática” y es propietario del comercio donde se comercializaba el equipo.
Según los magistrados, esos elementos permiten determinar que “no es un improvisado” sino alguien que “tiene conocimiento de la clase de productos que ofrece a la venta lo que llevó a los jueces a concluir que Leone tendría conocimiento del origen ilícito de ese “sofisticado equipo”.
Télam
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